Aki no riyū (2016)

Cultura Cine 15/11/2016

El quinto trabajo como director del poeta Fukuma Kenji. Con un reparto estelar -Sano Kazuhiro, conocido por sus películas violentas, de género “pinky”, Itō Yōzaburō, famoso por la serie Abunai keiji (policía peligroso), Terashima Shinobu, Shuri-, se trata de una conmovedora historia de adultos en medio de un cine japonés dominado por las historias para jóvenes.

English
日本語
简体字
繁體字
Français
Español
العربية
Русский

Datos de la producción

Director: Fukuma Kenji
Reparto: Itō Yōzaburō, Sano Kazuhiro, Shuri, Terashima Shinobu
Guion: Fukuma Kenji, Takada Ryō
Productores: Fukuma Keiko, Kobayashi Ryōji
Fotografía: Suzuki Kazuhiro
Sonido: Ogawa Takeshi
Montaje: Hata Takeshi
Música y diseño publicitario: Kiyooka Hideya
Producción: tough mama / Shibuya Production
Año de producción: 2015
País de origen: Japón
Distribución: Shibuya Production
Duración: 88 minutos
Fecha de estreno: 29 de octubre (sábado), K’s cinema, Shinjuku; posteriormente en todo el país
Página web: http://akinoriyuu.com/index.html
Facebook

Puntos de interés

El director Fukuma Kenji es un poeta que, además de dar clase en la universidad, ha traducido literatura inglesa y norteamericana y producido poesía durante muchos años. De joven actuó en películas de Wakamatsu Kōji o Adachi Masao, llegando a inmiscuirse profundamente en el mundo del cine. Interpretó el papel principal de Tōrima no Kokuhaku - Gendai seihanzai ankokuhen (“Confesiones de un atacante callejero - crímenes sexuales contemporáneos”, Wakamatsu Kōji, 1969), y firmó su guion bajo el pseudónimo Deguchi Izuru.

También escribió el guion de Like a Rolling Stone (“Como un canto rodado”, Satō Toshiki, 1995), bajo el pseudónimo Tachibana Shinji. Aunque el título hace referencia a la famosa canción de Bob Dylan, ahora centro de atención mediática debido a su premio Nobel de Literatura, y en ello se deja ver su vertiente de poeta, al ser estrenada recibió un título mucho más cercano al género pinky: Monzetsu honban buchikomu! (¡Una actuación para desmayarse!)

Ese mismo año debutó como director, ya con 46 años, con la cinta Kyū ni tadoritsuite shimau (Llego de pronto). Posteriormente no dirigió nada durante 13 años, hasta que firmó su segunda película, Okayama no musume (La chica de Okayama), y desde entonces ha dirigido a un ritmo de una obra cada dos o tres años. Aki no riyū es su quinta obra.

El extraño título proviene de una frase en una colección de poemas que el propio Fukuda publicó en 2000, y que uno de los personajes pronuncia en la película. En ella, se trata del título de una obra que el escritor protagonista publicó en el pasado. Desde esa publicación no ha sido capaz de escribir nada, y como consecuencia de la tensión que esto le provoca, ha perdido la voz.

El actor que da vida al protagonista es el director de cine Sano Kazuhiro, quien sufrió la extirpación de sus cuerdas vocales debido a un cáncer de faringe. Tras los años ochenta, cuando Nikkatsu dejó de producir cintas pornográficas, se convirtió en uno de los “cuatro dioses del pinky”, en su época más oscura, en la que se dedicaba a crear ese tipo de películas. Además de Sano, en Aki no riyū aparecen como extras el ya mencionado Satō Toshiki, Satō Hisayasu, y Zeze Takahisa, el reparto completo de los “dioses”.

Pese a estos fuertes vínculos personales con el género pinky, Aki no riyū es una obra sin igual en el mundo cinemátográfico, que se adentra en profundidad en una tranquila poesía que podría situarse en las antípodas de lo que el porno representa.

La historia, localizada en Kunitachi, se desarrolla en un ambiente cargado de cotidianidad. Los personajes son seres humanos como nosotros. Tienen problemas laborales, les falta el dinero, sus relaciones de pareja no van bien. Vuelcan su corazón con sus amigos, y en ocasiones los traicionan. Hay ideas que no logran expresar, y palabras que no consiguen transmitir. Y, en un momento dado hay un susurro: “Ya es otoño” (una cita de Wakare, “La despedida”, de Ranpō Edogawa).

Los poemas que Shuri, actriz de moda, lee con destreza, están cargados de cielos de otoño, de hojas secas y bellotas, y sin duda resonarán con todo tipo de timbres en los corazones del público. Está claro: esta temporada hay que ir al cine y explorar todas esas “razones del otoño”.

Aki no riyū (2016)

Datos de la producción

Puntos de interés

Tráiler

Artículos relacionados