Peregrinaje monocromático

Donde habitan los dioses: la roca Bonten-iwa de Nagatoro

Arte Naturaleza Cultura

Ōsaka Hiroshi capta con cámara monocromática elementos de la naturaleza a los que se rinde culto por ser el hogar de divinidades, como los iwakura (rocas) o los kannabi (montañas o bosques). En la séptima entrega de esta serie, les presentamos una roca gigantesca situada en Nagatoro —un municipio de naturaleza exuberante en la prefectura de Saitama— que es un lugar de culto en el río.

Un “tatami de roca” creado por los movimientos tectónicos

Nagatoro, un municipio del noroeste de la prefectura de Saitama, floreció como enclave turístico desde la era Meiji (1868-1912) por su belleza paisajística y hoy en día sigue recibiendo un abundante flujo de visitantes. Todo el término municipal está designado como parque natural prefectural y tiene especial fama como lugar pintoresco el valle de Nagatoro, que se extiende a lo largo del río Arakawa, que fluye por el centro de la ciudad. Iwadatami, una zona de suelo formado por capas de roca superpuesta, es un reclamo especial por su singular aspecto. Decidí ir allí para inmortalizar una roca sagrada que se conserva como lugar de culto.

La estación de Nagatoro tiene más de cien años. Fue seleccionada como una de las “Cien mejores estaciones de Kantō”. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
La estación de Nagatoro tiene más de cien años. Fue seleccionada como una de las “Cien mejores estaciones de Kantō”. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.

Llego a la estación de Nagatoro, en la línea de ferrocarriles de Chichibu, en un trayecto de un par de horas en tren con algunos transbordos desde el centro de Tokio. El edificio de madera que aloja la estación, con su tejado rojo y su aire retro, no ha cambiado desde que se inaugurara en 1911.

Iwadatami con sus capas de roca expuestas. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Iwadatami con sus capas de roca expuestas. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.

Bajo la cuesta flanqueada por tiendas de productos típicos del lado este de la estación y, al llegar a la playa fluvial, veo las rocas de Iwadatami, que se extienden por la orilla del río. Es un suelo rocoso modelado por movimientos tectónicos cuyo nombre (‘tatami de roca’) se debe a que sus cortes horizontales y verticales recuerdan a las esterillas de tatami colocadas en el suelo. Una vez allí, decido caminar los 600 metros de extensión de suelo rocoso para buscar el iwakura, la roca sagrada.

La escarpa de falla de la otra orilla del río se conoce como Chichibu Sekiheki en honor al famoso enclave del río chino Yangtsé. Fotografía: Kitasaki Jirō.
La escarpa de falla de la otra orilla del río se conoce como Chichibu Sekiheki en honor al famoso enclave del río chino Yangtsé. Fotografía: Kitasaki Jirō.

Un lugar de culto ancestral para rezar por la seguridad del río

En las orillas del río Arakawa de la región de Chichibu viene legándose un acto folclórico conocido desde antiguo como Sengori en el que los participantes se purifican el cuerpo en los vados recogiendo agua y tirándola para rogar por la seguridad del río. Cuando llega el verano en Nagatoro, en las gigantescas rocas de la playa fluvial se plantan palos de bambú de los que cuelgan unos objetos rituales (heisoku) llamados Bonten y diez personas se colocan alineadas para llevar a cabo el ritual. Los lugareños llaman a este lugar de culto Bonten-iwa.

Camino corriente arriba por la lisa superficie de las rocas, a punto de resbalarme un montón de veces. Cuando estoy llegando al final de Iwadatami, ante mí aparece Bonten-iwa. La enorme roca que se alza del suelo de Iwadatami proyecta un aire de profundidad que se me antoja idóneo para los rituales.

El topónimo de Nagatoro (長瀞), formado por los caracteres 長 (‘largo’) y 瀞 (‘piscina fluvial’), se refiere a una larga extensión por donde el río fluye sereno. Sin embargo, a unos 100 metros corriente arriba desde Bonten-iwa hay un punto de corriente rápida conocido como Kodaki no Se. El día que lo visito, el caudal ha crecido por la lluvia y el río baja con un flujo torrencial.

Kodaki no Se está en el extremo sur de Iwadatami. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.

Kodaki no Se está en el extremo sur de Iwadatami. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.

Iwadatami de Nagatoro

  • Dirección: Nagatoro, Nagatoro-machi, Chichibu-gun, Saitama-ken

Es una zona rocosa situada en el sur del valle de Nagatoro, declarado monumento natural de un enclave nacional de belleza paisajística. Sus rocas son esquistos cristalinos, formados a presiones y temperaturas elevadas a entre 20 y 30 kilómetros de profundidad. Al quedar expuestas en la superficie, el fenómeno de la expansión hizo que se les abrieran grietas con forma de retícula. El paisaje cambia de color con las estaciones, cubriéndose de verde en verano y de varios tonos en otoño. Se puede bajar por el río en barcas de estilo tradicional.

Reportaje, texto y edición: Kitasaki Jirō.

Fotografía del encabezado: la roca Bonten-iwa de Nagatoro, en Chichibu.

Fotografía: Ōsaka Hiroshi.

(Traducido al español del original en japonés.)

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