La educación secundaria superior y la universidad se encarecen y los salarios se estancan

Según un informe de la Corporación de Finanzas de Japón sobre los costos de educación, para los tres años de educación secundaria superior se necesitan 2.374.000 yenes, y para la universidad 7.160.000, esto es, un total de 9.534.000 yenes. Las familias japonesas deben prepararse seriamente para desembolsar casi 10.000.000 de yenes en ese periodo. Además, tienen que considerar otros gastos tales como la alimentación y la ropa. Sin olvidar que es una edad en la que los hijos piden dinero para salir con sus amigos o comprar los dispositivos más novedosos.

Anualmente, cada hijo representa un gasto escolar anual de 685.000 yenes si está en secundaria superior, y de 1.569.000 yenes si está en la universidad. Esto incluye gastos como matrícula, transporte, materiales escolares y clases preparatorias. Sin embargo, también hay que añadir otros 319.000 yenes para un hijo en primer año de secundaria superior y 884.000 para un hijo que ingresa a la universidad, por gastos como el examen de admisión, la inscripción y los pagos a instituciones no elegidas.

Por otra parte, dependiendo del tipo de universidad y la licenciatura que se elija, se necesitarán 7.767.000 yenes si se ingresa a una universidad pública y, en el caso de las privadas, 9.682.000 si se trata de alguna carrera de humanidades y ciencias sociales y 10.641.000 yenes si es alguna carrera de ciencias naturales o ingeniería. En otras palabras, hay una diferencia de entre dos y tres millones de yenes dependiendo de si la universidad en la que se matricula es pública o privada.

Con respecto al origen de los recursos para la educación secundaria superior y superior, el informe revela que el 31,7 % de las personas los obtiene reduciendo otros gastos o ahorrando, el 23,3 % utilizando algún seguro o sus ahorros, el 21 % de una beca y el 20,3 % trabajando a tiempo parcial (los propios estudiantes).

La generación de los padres de los ahora universitarios asistió a la universidad en el momento pico de la burbuja económica de Japón. Según las estadísticas históricas del Ministerio de Educación y Cultura, en 1989, la matrícula anual en una universidad privada era de 570.584 yenes y, en 2017, de 900.093, esto es, un incremento de 330.000 yenes. En contraste, el salario promedio en el sector privado alcanzó su máximo en 1997 y ha ido disminuyendo desde entonces. En 2009 tocó fondo y ahora, por fin, ha recuperado el nivel que tenía antes de la crisis de Lehman Brothers. Por lo tanto, los gastos escolares se han convertido en una mayor carga para las familias.

Fotografía del encabezado: PIXTA.