El promedio de vida de las empresas japonesas que quebraron en 2018 fue de casi 24 años

Economía

Según TOKYO SHOKO RESEARCH, el promedio de vida de las empresas japonesas que quebraron en 2018 fue de 23,9 años, esto representa un aumento de 0,4 años con respecto al año anterior y el primero en tres años.

En 2018, 8.235 empresas en todo Japón quebraron con una deuda de más de 10.000.000 de yenes. En esta ocasión analizamos los casos de 7.009 de ellas, exceptuando las 1.226 que no tenían clara su fecha de fundación.

TOKYO SHOKO RESEARCH señala que, en 2018, las instituciones financieras comenzaron a tomar decisiones crediticias con base en la “evaluación de posibilidades de negocio”, por lo que las pequeñas y medianas empresas pudieron recibir apoyo para reestructurarse y esto hizo que aumentara el promedio de vida de aquellas que estaban en quiebra. Según el centro de investigación, en 2017, el año anterior, el promedio de vida corporativa cayó como consecuencia del aumento de las bancarrotas en empresas con poca historia del sector servicios: firmas relacionadas con la alimentación que se enfrentan a menos dificultades para emprender y negocios relacionados con el bienestar y los cuidados para los mayores que anticipaban la expansión del mercado por el envejecimiento de la población.

Por sectores, las empresas manufactureras son las que más tardan en quebrar, con un promedio de vida de 33,9 años. En contraste, las empresas de seguros y finanzas fueron las más débiles, con 11,7, una enorme diferencia de más de 22 años. Entre las empresas más longevas se encuentran los vendedores al por mayor con una vida promedio de 27,1 años, los servicios de transporte con 25,9 y las firmas relacionadas con la agricultura, silvicultura, pesca y minería con 25,1 años. Entre las que tuvieron una menor esperanza de vida destacan empresas del sector de la información y comunicaciones con 17,5 años así como las de servicios, que solo alcanzaron 17,7 años.

Años de vida promedio de las empresas que quebraron en 2018 por sectores

Manufacturas 33,9
Ventas al por mayor 27,1
Transporte 25,9
Agricultura, silvicultura, pesca y minería 25,1
Construcción 24,2
Ventas al por menor 24,2
Inmobiliarias 23,8
Servicios, otros 17,7
Información y comunicaciones 17,5
Finanzas y seguros 11,7

Elaborado por nippon.com a partir de los datos de TOKYO SHOKO RESEARCH

La mitad de las empresas manufactureras en bancarrota fueron firmas con solera

De las empresas en bancarrota, el porcentaje de aquellas que son consideradas “firmas con una larga historia”, es decir con más de 30 años de existencia, fue de 32,7 % (un aumento de 1,5 puntos porcentuales con respecto al año anterior). Por otra parte, el promedio de empresas con menos de 10 años de historia o “firmas recientes” fue de 24,8 % (0,3 puntos porcentuales por encima del año anterior), el mayor número en 15 años.

Por sectores, fueron las empresas manufactureras las que obtuvieron el mayor porcentaje de firmas con larga historia que quebraron con 57,1 % (52,9 % el año anterior). Seguidas de los vendedores al por mayor con 38,6 % (36,5 % el año anterior) y empresas agrícolas, silvícolas, de pesca o minería con 37,9 % (25,8 % el año anterior). En el caso de las empresas de reciente creación, el sector de finanzas y seguros obtuvo la cifra más alta con 73,3 % (44,7 % el año anterior), seguidas de las del sector servicios con 38,1 % (37,6 % el año anterior) y las de información y comunicaciones con 28 % (27,1 % el año anterior).

TOKYO SHOKO RESEARCH afirma que el promedio de negocios manufactureros con una larga historia que quiebran es alto ya que se enfrentan a problemas como la falta de capacidad para conseguir fondos en el caso de las empresas pequeñas y icroempresas, la escasez de mano de obra, el envejecimiento de los administradores así como los conflictos por la sucesión. Con respecto a por qué ha aumentado el número de empresas recientemente creadas que quiebran, el centro de investigación dice que a pesar de que los Gobiernos central y locales otorgan apoyo activamente para la creación de empresas, existen planes administrativos que no están bien cimentados.

Fotografía del encabezado: (xiangtao/PIXTA)

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