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Un documental sobre Tetsuyo, una experta de 104 años en el arte de vivir

Cine

La protagonista de un documental estrenado en Hiroshima que vieron más de 20.000 personas en tan solo cinco salas es Tetsuyo, mujer centenaria que vive sola. Yamamoto Kazuhiro, el director, nos habla de su protagonista, viuda ya durante 20 años pero con una vida llena de risas, rodeada de familiares y vecinos.

Yamamoto Kazuhiro YAMAMOTO Kazuhiro

Nacido en la prefectura de Hiroshima en 1987. Ha producido episodios documentales en programas como Sekai no shasō kara (Por la ventanilla del mundo, TV Asahi) y otros para la NHK. Obtuvo el Premio Incentivo de la Asociación Pública de Educación por Difusión Audiovisual por su obra Ichiman nin no karisuma! Nōgyō ni kakumei wo okosu “nōchūbā” (“¡El carisma de 10.000 personas! Los “YouTubérculos” que están causando una revolución en la agricultura”; 2019), y el Premio Presidencial por Kore ga oretachi no dentō – hito to tori ga tsunaida 450 nen (“Estas son nuestras tradiciones - 450 años de conexión entre personas y pájaros”; 2021) y Hibaku jumoku no koe wo kiku – Hiroshima no eien no midori (“Escucha la voz de los árboles bombardeados – el verdor eterno de Hiroshima”; 2022). En 2025 debutó como director de largometraje con 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi (“104 años: la vida en solitario de Tetsuyo”).

¿Resulta una molestia vivir mucho?

La población japonesa de personas de cien o más años se ha más que cuadruplicado en los últimos veinte años, y superó los 95.000 ciudadanos en 2024. La era de la esperanza de vida de 100 años parece cada vez más cercana, pero ese futuro se les antoja poco optimista a muchos japoneses.

Según una encuesta realizada en 2024 en seis países (Japón, Estados Unidos, China, Corea del Sur, Alemania y Finlandia) por el think tank Instituto de Investigación de los 100 Años de Vida de la firma publicitaria Hakuhodo, ante la pregunta “¿Le gustaría vivir hasta los 100 años?” la proporción de japoneses que respondieron “totalmente” o “creo que sí” fue del 27,5 %, la más baja entre los seis países. La razón principal parece ser que los encuestados no quieren causar problemas a los demás.

Ishii Tetsuyo celebró su 104 cumpleaños en la primavera de 2024. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Ishii Tetsuyo celebró su 104 cumpleaños en la primavera de 2024. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

La longevidad es un fastidio… Pero también hay quienes, como si quisieran disipar ese tipo de pensamientos negativos, celebran sus 100 años de vida.

Ishii Tetsuyo vive en Onomichi, en la prefectura de Hiroshima. Nació en 1920, el mismo año que las leyendas del cine japonés Mifune Toshirō y Hara Setsuko. Tras ejercer como maestra de primaria durante 36 años, trabajó para la comunidad como comisionada de bienestar social. Incluso hoy día siguen llamándola “maestra”. Se casó a los 26 años y vivió con su marido hasta que este murió, a los 83 años. Desde entonces vive sola, pero gracias al apoyo de sus familiares y de la comunidad local lleva una vida tranquila rodeada de la rica naturaleza de Onomichi.

A nivel local, ha aparecido en una serie de artículos del Chugoku Shimbun y es una celebridad en RCC TV (Chugoku Broadcasting Co.). Es famosa como “modelo para la nueva era con una esperanza de vida de más de 100 años”, y ha aparecido en dos libros, 102 sai, hitorigurashi - Tetsuyo san no kokoro mo karada mo sabinai ikikata (“Vivir sola a los 102 años: la forma de vida de Tetsuyo que le mantiene la mente y el cuerpo en forma”) y 103 sai, meigen darake. Naanchatte (“103 años, llena de sabias palabras… ¡Es broma!”); ambos publicados por Chugoku Shimbun y Bungei Shunjū, han vendido en total más de 210.000 ejemplares (a octubre de 2024).

RCC lleva 22 años siguiendo de forma irregular esa vida en solitario de Tetsuyo en el programa informativo vespertino de la cadena. La presente película se ha realizado por medio de una reedición de imágenes rodadas durante ese tiempo, y añadiendo una nueva narración del actor Lily Franky.

Un enfoque diferente sobre el “contacto cercano”

La película comienza con el regreso de Tetsuyo a casa tras una larga ausencia en el hospital. El director, Yamamoto Kazuhiro, que también dirigió la versión televisiva, recuerda ese momento.

Familiares y vecinos saludan a Tetsuyo a su salida del hospital. A la izquierda, su sobrina Yayoi. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Familiares y vecinos saludan a Tetsuyo a su salida del hospital. A la izquierda, su sobrina Yayoi. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

“En realidad, la escena inicial fue el día que la conocí. En un principio fui yo solo y rodé todo con mi iPhone. Lo normal es saludar primero a la persona en cuestión, pero como justo era el día que salía del hospital y era algo puntual decidí de pronto hacer esa filmación. Al ver las imágenes no parece nuestro primer encuentro, ¿verdad? Yo tampoco tuve la sensación de estar conociéndola por primera vez. Enseguida sentí una sensación de familiaridad, como si fuera la abuela de la casa de al lado”.

Es evidente que ese día no imaginaban que iban a continuar viéndose durante los siguientes tres años.

“La respuesta al primer episodio fue tan positiva que decidimos continuar con el reportaje, pero en lo personal yo disfrutaba mucho filmándola, y quería volver a verla; así que hicimos un programa cada dos o tres meses más o menos, de unos 20 minutos cada episodio. De vez en cuando me permitían cubrir los cumpleaños, la contemplación de los cerezos en flor, las visitas a las tumbas, etc. Durante una entrevista me enteré de que tenía que limpiar su almacén, de modo que le pedí que me dejara filmarla en esa ocasión, y así decidimos el siguiente programa”.

Tetsuyo visita la tumba con su sobrina Naoe, a la izquierda. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Tetsuyo visita la tumba con su sobrina Naoe, a la izquierda. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

Esta forma de hacer las cosas difiere de las llamadas entrevistas “de cerca”, ya que se trata solo de una persona mayor.

“No quería sobrecargarla. Intenté que el tiempo de rodaje fuera lo más corto posible, pero las historias eran tan interesantes que el tiempo corría, cada vez en sesiones de tres a cuatro horas, y cuando sentía que ya había rodado lo suficiente para un reportaje especial de 20 minutos volvía a casa, aunque me habría gustado quedarme un poco más”.

Las entrevistas reflejan la visión del documental que tiene Yamamoto, con experiencia en muchos programas.

Yamamoto Kazuhiro, el director de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi. (Fotografía: nippon.com)
Yamamoto Kazuhiro, el director de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi. (Fotografía: nippon.com)

“Siempre he pensado que es importante escuchar a la gente. Intento mantener la distancia justa. Siempre tengo una idea sobre el tema, claro, pero si trato de guiar al entrevistado enseguida tiene la sensación de que le están diciendo lo que tiene que decir. A veces es necesario tener la tensión justa, pero en esta ocasión pensé que era especialmente importante que nos divirtiéramos con Tetsuyo y la gente que la rodea. Sin embargo no funcionaría como reportaje especial en un programa informativo, de ser demasiado relajado, así que tuvimos que idear algún tipo de tema para cada episodio en línea con la idea de los cien años de vida… como, por ejemplo, cuando llegaba agosto y decidimos preguntarle por la guerra”.

Las numerosas frases de Tetsuyo, ricas en connotaciones, también se recogen en el transcurso de charlas, y no en entrevistas formales.

“Debe de haber sido como charlar con los niños del barrio. Tenemos un tema para el día, pero lo más importante es conseguir que hablen relajados. De repente empiezan a decir cosas interesantes, y si una historia surge una y otra vez empiezas a darte cuenta de que es un recuerdo importante para ellos”.

Tetsuyo corta puerros con un cuchillo que ha visto días mejores. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Tetsuyo corta puerros con un cuchillo que ha visto días mejores. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

La intención no es solo compartir sus palabras, sino también mostrar cuidadosamente sus gestos cotidianos: al preparar té, pelar peras o cocinar sopa de miso. Al hacerlo, por mucho cuidado que el director pusiera en no sobrecargar al espectador, es probable que a veces le surgiera el deseo de rodar alguno de esos gestos determinados.

“Sí, eso es. Tetsuyo es muy sencilla, y aceptaba todo lo que yo le sugería. Hice que una productora filmara la escena del baño en el centro de atención diaria. Fue durante la pandemia del coronavirus, y pensé que sería imposible rodar en el baño, pero el centro nos dio permiso”.

De un programa informativo a una película

Hay otra escena que Yamamoto tenía muchas ganas de filmar: aquella en la que Tetsuyo va a ver a su hermana. Momoyo, siete años menor y su única hermana superviviente, está postrada en cama desde que sufrió un derrame cerebral hace unos diez años, y vive en una residencia cercana a su casa de Kobe. Cuando habla de su hermana, a Tetsuyo, una persona muy sonriente, se le llenan los ojos de lágrimas.

“Yayoi, su sobrina, me pidió que la grabara porque no sabía si durante un tiempo no podrían verse. Era durante lo peor de la pandemia, y no podía tener un grupo grande de personas conmigo, así que de nuevo fui el único que manejaba la cámara”.

Durante los escasos diez minutos que duró la visita, Tetsuyo (de 102 años en ese momento) no paraba de llamar por medio de una pizarra acrílica a su hermana de 95 años, que no podía moverse ni hablar. La idea de hacer una película empezó a tomar forma en el instante en que la cámara captó esta escena dramática, en un intervalo en la tranquila rutina diaria de Tetsuyo.

“Incluso antes de eso ya había empezado a pensar que Tetsuyo no cabría en una película de tamaño televisivo. En aquel momento solo tenía una vaga esperanza de poder hacer un largometraje”.

La casa de Tetsuyo está en lo alto de una cuesta empinada. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
La casa de Tetsuyo está en lo alto de una cuesta empinada. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

La escena, por ejemplo, en la que Tetsuyo desciende sola por la empinada cuesta frente a su casa.

“En televisión solo puedes dedicar 10 segundos como máximo a un plano. En cine puedes tomarte tu tiempo, y dedicarle 20 segundos o más. El cámara no para de girar la cámara, sea consciente o no de la duración de la película (risas). Y ese es el tiempo que tienes para mirar. Lo que aguanta la imagen”.

El director Yamamoto, que ha entrevistado a muchas personas, afirma que es difícil encontrar seres tan “pintorescos”. Como ejemplo, cita el nombre de una pianista de fama mundial.

“Entrevisté a Fujiko Hemming varias veces; Tetsuyo también tiene el aura de haber alcanzado ese tipo de maestría. Tetsuyo no es artista, pero creo que es una maestra de relaciones y de la vida. Por eso quiero rodar con ella, incluso cuando solo está arrancando hierbajos alrededor de su casa”.

Yamamoto también pudo incluir escenas que no aparecieron en televisión. Una de ellas es cuando Tetsuyo muestra un poema que escribió sobre su hermana y que lee Lily Franky.

“Tetsuyo me dijo que había escrito un poema tras regresar de la visita, pero no podía encontrar el papel en el que lo había escrito. Más tarde, el productor y yo buscamos con ahínco en la casa y lo encontramos (risas)”.

Tetsuyo canta junto a sus antiguos alumnos durante una fiesta de reunión. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Tetsuyo canta junto a sus antiguos alumnos durante una fiesta de reunión. (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

Por qué seguir viviendo en la misma casa, y el secreto de una vida larga

Esta no es solo una película conmovedora sobre la vida cotidiana de una abuela adorable.

“Intenté mostrar las preocupaciones que se escondían detrás de esa sonrisa. De ahí se desprende la razón por la que Tetsuyo vive sola. No creo que su deseo de proteger la casa de su familia esté ligado a viejos valores. Lo que realmente quiere es seguir viviendo en la casa donde pasó tanto tiempo con su amado esposo. Sus parientes lo entienden y la apoyan”.

Tetsuyo vive en casa sin dificultad, utilizando los servicios de atención diaria y algunas estancias cortas en sus instalaciones. Mientras está en su casa necesita que las personas que la rodean se ocupen de ella, pero es una “experta en ser cuidada”.

Tetsuyo asegura que está bien a cuantos la rodean, pese a su preocupación por el estado de sus piernas… (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
Tetsuyo asegura que está bien a cuantos la rodean, pese a su preocupación por el estado de sus piernas… (© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

“Tetsuyo siempre dice: ‘Perdón por causarte problemas…’, pero para ella no tiene sentido contar las cosas que no puede hacer; más bien hace lo que puede. Confía en quienes puede confiar. Sería bueno que más gente tuviera esta actitud. Por supuesto, sería más fácil que se quedara en un hospital o institución; pero si lo hace se irá deteriorando. A veces tiene que hospitalizarse, pero siempre la mueve el deseo de volver a casa. Por eso no se queda postrada en cama. Creo que vivir en esa casa es el secreto de su larga vida”.

Con el envejecimiento de la población japonesa, las diversas escenas de la película no resultarán extrañas para nadie. La cámara sigue a Tetsuyo, pero muchos espectadores, sin duda, se fijarán también en las personas que la rodean y cuidan de ella.

“Yayoi dice que el secreto de la larga vida de Tetsuyo es que actúa en beneficio de los demás. Por eso ella también la apoya y recibe energía de ella. Puede moverse porque lo hace para otras personas. Si tuviera que hacerlo por ella misma quizá se fuera dejando. El Club Nakayoshi al que asiste lo fundó la propia Tetsuyo hace unos 50 años para las personas mayores de la zona. Algo que hizo por los demás le vuelve ahora. Es un buen ciclo. Me alegro de haber podido hacer esta película; con ella, la energía de Tetsuyo circula hacia más gente todavía”.

(© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
(© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

Texto: Matsumoto Tetsuya (nippon.com)

(© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)
(© Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi)

Información de la película

  • Narración: Lily Franky
  • Dirección y montaje: Yamamoto Kazuhiro
  • Fotografía: Matoba Taihei, Tsutsui Toshiyuki
  • Sonido: Kaneda Tomoko / producción sonora: Tominaga Ken’ichi
  • Dirección de producción: Nakamura Tomoki, Yoshida Naoko, Izumo Shiho, Takayama Hideyuki
  • Supervisión de producción: Okamoto Sachi
  • Producción: RCC
  • Colaboración: RCC Frontier / Asociación Pública de Educación por Audiovisuales (fundación de interés público) / periódico Chugoku Shimbun
  • Apoyo: Prefectura de Hiroshima, ciudad de Onomichi, ciudad de Fuchū
  • Distribución: Regard
  • Año: 2024
  • País: Japón
  • Duración: 94 minutos
  • Página web oficial (en japonés): https://rcc.jp/104-hitori/
  • En Cine Switch Ginza y otras salas de todo el país

Tráiler

(Artículo traducido al español del original en japonés. Imagen del encabezado: © Comité de producción de 104 sai, Tetsuyo san no hitori gurashi.)

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