El futuro de la pareja imperial tras la abdicación

Después de la abdicación del Emperador Akihito, la pareja imperial de Japón pasará a llevar los títulos de jōkō (Emperador Emérito) y jōkōgō (Emperatriz Emérita); mientras que el primero es un título adoptado por otros emperadores retirados en el pasado, el segundo es inédito. La traducción oficial en inglés incluirá, detrás del Emperador y Emperatriz que dichos títulos llevan hasta la fecha, el adjetivo Emérito/Emérita, que denota el retiro de las funciones del cargo original.

Un traslado a Akasaka, pasando por Takanawa

Los Emperadores Eméritos no se involucrarán directamente en las funciones públicas. En el mensaje de vídeo emitido en agosto de 2016, que marcó un antes y un después en el debate sobre la abdicación, el Emperador expresó abiertamente la opinión de que la edad avanzada dificultaría el cumplimiento de las obligaciones imperiales. El Emérito/Emérita que formará parte de los futuros títulos de los Emperadores implica de forma clara la idea de que se retiran de su posición pública. También la mayoría de los expertos coinciden en prever que en adelante la pareja imperial se dedicará a su vida privada más que a la pública.

El Emperador desempeña distintos tipos de obligaciones públicas. Según la Agencia de la Casa Imperial, en 2017 Su Majestad tuvo que revisar, firmar y sellar 960 decisiones del Gabinete relativas a asuntos de Estado, además de asistir a unos doscientos actos entre los de investidura del primer ministro, acreditación diplomática de ministros plenipotenciarios, audiencias y banquetes. También participó en los rituales religiosos de palacio, que en ocasiones empiezan de madrugada.

El entorno cotidiano de los Emperadores cambiará radicalmente al desvincularse de los deberes públicos después de la abdicación. Para empezar, deberán desocupar el palacio en el que llevan casi treinta años viviendo para trasladarse un kilómetro hacia el oeste e instalarse en el Palacio Oriental de la Finca Imperial de Akasaka. Sin embargo, como hay que renovar el Palacio Imperial y hacer obras en el Palacio Oriental para hacerlo accesible cuando el príncipe Naruhito y su familia se trasladen al primero, de momento los Emperadores se trasladarán a la Residencia Imperial de Takanawa (antes, Residencia Imperial Takamatsu), que se halla a tres kilómetros del Palacio Imperial. Se calcula que la residencia de los futuros Emperadores Eméritos en Akasaka estará lista para su ocupación en el año fiscal 2020.

El Palacio Oriental de Akasaka se halla en la finca donde los Emperadores vivieron desde 1960, el año después de casarse, hasta 1993, años después de la coronación del Emperador Akihito. La residencia se rebautizará con el nombre de Palacio de Sentō en ocasión del traslado de los nuevos inquilinos. La Finca Imperial de Akasaka también acoge otras residencias de la familia imperial, como la Residencia del Príncipe Akishino, así como la Casa de Invitados del Estado de Akasaka, entre otros edificios.

Una vida centrada en las aficiones y la investigación

En adelante los Emperadores seguramente dispondrán de mucho tiempo para disfrutar de sus aficiones. La pareja se conoció jugando al tenis en Karuizawa en los años cincuenta, y es sabido que ambos gustan de hacer ejercicio. Actualmente siguen practicando el tenis, el footing suave y las caminatas de forma habitual.

Hay quien espera que los Emperadores profundicen en sus proyectos personales. El Emperador Akihito es especialista en la taxonomía de gobioideos y ha firmado un total de 33 artículos en publicaciones científicas como la de la Asociación de Ictiología de Japón, además de escribir numerosos libros. Puede que después de retirarse, Su Majestad consagre mucho tiempo a la investigación y obtenga nuevos resultados.

La Emperatriz Michiko, amante de la literatura, también dispondrá de mucho tiempo para dedicarse a sus intereses. En el discurso que pronunció por su octogésimo cuarto cumpleaños, la Emperatriz declaró “Tengo pendientes de leer dos o tres volúmenes de Jeeves” (Jeeves es una saga de novelas del escritor británico Pelham Grenville Wodehouse, protagonizada por un criado); así expresaba sus ganas de sumergirse en la lectura de dichas obras de éxito mundial, algo para lo cual antes no tenía tiempo, ocupada con sus obligaciones oficiales.

La pareja imperial también comparte el amor por la música: el Emperador toca el violoncello y la Emperatriz, el piano. Antes ya tenían ocasión de disfrutar de actos musicales en Japón y en el extranjero, pero en adelante probablemente cuenten con más oportunidades para asistir a conciertos. También podrán pasar temporadas largas en sus residencias vacacionales de Nasu (Tochigi), Hayama (Kanagawa) y Susaki (Shizuoka), y tendrán muchas oportunidades de viajar por placer.

Tampoco es que, tras la abdicación, los Emperadores vayan a renunciar a toda comparecencia pública. Es probable que en alguna ocasión se pueda observar al Emperador, por ejemplo, buscando ejemplares de gobios a orillas del río o del mar, cerca de las residencias vacacionales, o de ver a la pareja dando alguno de sus paseos; también es posible que hagan acto de presencia en la visita oficial a Palacio de Año Nuevo.

El relevo de las obligaciones oficiales de los actuales Emperadores lo tomarán principalmente los nuevos Emperadores y los Príncipes de Akishino. El futuro Emperador, Naruhito, se encargará de ocupar la función de emperador simbólico, mientras que el Príncipe de Akishino, primero en la lista de sucesión, se encargará de las obligaciones de príncipe.

Los presupuestos nacionales para el año fiscal 2019 reservan a los gastos de la Casa Imperial y la Agencia de la Casa Imperial 24.064 millones de yenes, 324 de los cuales se destinan al presupuesto privado del Emperador y la Familia Imperial (Emperadores Eméritos y familia del Emperador). El presupuesto cotidiano de los Emperadores Eméritos, incluido en el de la familia imperial, no se verá reducido tras la abdicación. Por otro lado, cada palacio familiar recibe 264 millones de presupuesto privado; el cabeza de familia tiene asignados 30,5 millones, pero en el caso del Príncipe Akishino, la cifra se triplicará cuando ocupe el puesto de heredero al trono.

Redacción: Masuda Miki

Fotografía del encabezado: el Emperador Akihito y la Emperatriz Michiko pasean por campos cultivados en Ōhinata, Karuizawa (prefectura de Nagano), el 23 de agosto de 2018. (Jiji Press)