MERCADOS GLOBALES: Alarmadas por la inflación en EEUU, las bolsas de Asia ponen sus ojos en la Fed

FOTO DE ARCHIVO: Operadores frente a una pantalla en el edificio de la Bolsa de Tailandia en Bangkok, Tailandia, 13 de marzo de 2020. REUTERS/Juarawee Kittisilpa
FOTO DE ARCHIVO: Operadores frente a una pantalla en el edificio de la Bolsa de Tailandia en Bangkok, Tailandia, 13 de marzo de 2020. REUTERS/Juarawee Kittisilpa

Por Wayne Cole

SYDNEY, 13 may (Reuters) - Las bolsas asiáticas caían a mínimos de siete semanas este jueves, después de que el sorprendente aumento de la inflación en EEUU haya sacudido a Wall Street, haciendo además que los rendimientos de los bonos se disparen ante el temor de que la Reserva Federal tenga que anticiparse a la hora de endurecer su política monetaria.

"El aumento de la inflación es definitivamente negativo para la renta variable, dada la respuesta probable de los tipos", dijo el estratega macro de Deutsche Bank, Alan Ruskin.

"Cuanto más dominen las ganancias del PIB nominal por la inflación más alta, especialmente la inflación salarial, mayor será la posible reducción de los márgenes de beneficio. Esto juega a favor de un sentimiento más agitado y menos alcista de la renta variable".

El índice más amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico —que excluye a Japón— perdía un 0,9%, aunque el volumen era limitado por los días festivos en varios países.

El Nikkei japonés caía un 2% y alcanzó su nivel más bajo desde principios de enero, mientras que los valores chinos cedían un 0,9%.

Los mercados asiáticos ya estaban tocados esta semana debido a la preocupación por la inflación y a las ventas de productos tecnológicos en Wall Street, y el miércoles los nervios se vieron aún más alterados cuando las acciones de Taiwán cayeron ante el temor de que la isla se viera sometida a un confinamiento parcial debido a un brote del coronavirus. 

Los futuros del Nasdaq intentaban repuntar con una ganancia del 0,4%, mientras que los futuros del S&P 500 sumaban un 0,3%. Sin embargo, los futuros del EUROSTOXX 50 seguían recuperándose de las caídas de la noche y perdían un 0,7%, mientras que los futuros del FTSE cedían un 0,5%.

Wall Street se vio sorprendido por los datos que mostraban que los precios al consumo en Estados Unidos experimentaron en abril su mayor aumento en casi 12 años, ya que el incremento de la demanda ante la reapertura de la economía compensó las limitaciones de la oferta en el país y en el extranjero. 

El repunte se debió en gran medida a los aumentos desmesurados de las tarifas aéreas, los coches usados y los costes de alojamiento, todos ellos impulsados por la pandemia y probablemente transitorios.

Los dirigentes de la Fed se apresuraron a restar importancia al impacto de las cifras de un mes, y el vicepresidente Richard Clarida afirmó que el estímulo seguirá siendo necesario durante "algún tiempo".

"Probablemente haría falta un informe de empleo muy positivo en mayo, con revisiones al alza considerables en marzo y sobre todo en abril, para que la Fed inicie un debate sobre la reducción de estímulos en su reunión de junio", dijo el economista de JPMorgan Michael S. Hanson.

"Seguimos esperando que la Fed comience a reducir su ritmo de compras de activos a principios del próximo año".

MAL TRAGO PARA EL BITCÓIN

Los inversores reaccionaron descontando un 80% de posibilidades de que la Fed suba los tipos ya en diciembre del año que viene. 

El rendimiento de referencia del Tesoro estadounidense a 10 años se estabilizaba en el 1,68%, tras haber subido 7 puntos básicos durante la noche en la mayor subida diaria en dos meses. La curva de rendimiento también se inclinaba notablemente para reflejar el riesgo de aumento de la inflación.

Esto ha supuesto una inyección de moral para el dólar, que ha estado cediendo bajo el peso de la rápida expansión de los déficits presupuestario y comercial de Estados Unidos. El euro retrocedía a 1,2078 dólares, dejando atrás un máximo de 10 semanas en 1,2180 dólares.

El dólar se situaba en 109,66 yenes, tras alcanzar un máximo de cinco semanas en 109,78 y muy lejos del mínimo de esta semana en 108,34. El índice del dólar se situaba en 90,737, tras un mínimo de 10 semanas de 89,979.

En las criptodivisas, el bitcóin se estabilizaba tras caer más de un 10% cuando Elon Musk tuiteó que Tesla Inc había suspendido el uso del bitcóin para comprar sus vehículos. 

La subida de los rendimientos y del dólar presionaba al oro, que se dejaba 1.818 dólares la onza y salió de un máximo múltiple en torno a los 1.845 dólares. [GOL/]

Los precios del petróleo retrocedían desde su máximo de dos meses, alcanzado después de que se desplomaran las exportaciones de crudo de Estados Unidos y de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) dijera que la demanda ya estaba superando a la oferta. [O/R]

El Brent bajaba 68 centavos a 68,64 dólares el barril, mientras que el crudo estadounidense cedía 68 centavos a 65,40 dólares.

(Editado por Sam Holmes y Shri Navaratnam; traducción de Flora Gómez en la redacción de Gdansk)

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