Lugares espirituales de Japón

Patrimonio de la Humanidad en Hiraizumi: el paraíso de la Tierra Pura del Mōtsūji

Cultura

Mōtsūji es un templo de la prefectura de Iwate registrado como Patrimonio de la Humanidad con gran presencia en la historia. Presume de contar con unos magníficos jardines budistas de la Tierra Pura y ofrece sesiones de meditación zen y transcripción de sutras para centrar la mente y el espíritu.

Uno de los rincones más sagrados de Japón

En 2011 fueron registrados en la lista del Patrimonio de la Humanidad cinco templos, jardines y yacimientos arqueológicos representativos del budismo de la Tierra Pura en Hiraizumi, en el norte de la prefectura de Iwate. Uno de los principales lugares entre ellos es el templo Mōtsūji. Su establecimiento en el año 850—junto con otro sitio registrado, el Chūsonji—se atribuye a un abad de la secta Tendai, Ennin (Jikaku Daishi).

El pabellón principal del templo, reconstruido en 1989 en el estilo del período Heian (794-1185).

El Mōtsūji quedó abandonado hasta al menos mediados del siglo XII (el período Heian tardío), cuando el segundo líder del clan Ōshū Fujiwara en el poder, Motohira, se ocupó de su reconstrucción. El padre de Motohira visualizó la creación de una tierra pacífica inspirada en los principios budistas en Hiraizumi, y su hijo no dudó en gastar grandes cantidades de los beneficios de la abundante minería del oro de la zona en hacer realidad el sueño de su padre.

Motohira contrató al prestigioso escultor Unkei, residente en Kioto, para cincelar la imagen principal para el pabellón central original del Mōtsūji, el Kondō Enryūji. En los tres años que tardó en ser completada, Motohira envió grandes cantidades de polvo de oro, sedas y otros tesoros a Unkei como pago. Pero cuando fue terminada la imagen del buda de la salud, Yakushi Nyorai, el Emperador Toba quedó tan conmovido por la obra maestra de este escultor que prohibió que la figura saliese de la capital. Motohira, agraviado, se encerró en el templo, se negó a comer y persuadió al consejero jefe del Emperador para que interviniera en su nombre hasta que finalmente la escultura de Unkei fue enviada a Hiraizumi.

Tras la muerte de Motohira, su hijo continuó con la reconstrucción del Mōtsūji, y en el punto álgido el templo contó con más de 40 edificios y unos 500 monasterios. El Azuma kagami, un registro histórico reunido entre finales del siglo XIII y comienzos del XIV, lo describe como “un lugar sagrado de majestuosidad sin parangón”.

Lugar en el que se encontraba el pabellón principal del Kondō Enryūji de Motohira.

El Mōtsūji vivió innumerables incendios en los años que le siguieron, y finalmente cada uno de sus edificios—junto con la famosa estatua de Yakushi Nyorai de Unkei—fue consumido por las llamas. De hecho aún se pueden ver restos de su diseño original en sus cimientos y otras ruinas, así como su jardín de la Tierra Pura al estilo del período Heian.

El Depósito de Bienes Culturales, situado justo en el interior por la puerta principal del templo, expone estatuillas budistas del período Heian, artefactos excavados, materiales de investigación y otros objetos relacionados con el templo y su historia. Merece la pena visitarlo de camino como apoyo para visualizar el complejo del templo original a medida que se explora el lugar.

Paseando a través de un jardín paradisíaco

En la parte derecha del Ōizumi-ga-Ike, un estanque del jardín de la Tierra Pura, hay unas isletas de roca.

Sucesivas generaciones del clan Ōshū Fujiwara aspiraron a crear un paraíso budista de la Tierra Pura en Hiraizumi. El jardín de la Tierra Pura que construyeron basándose en el texto japonés más antiguo sobre paisajismo, que data del período Heian, es una encarnación exquisita de este cometido. La pieza central del jardín es el estanque de 180 x 90 metros, Ōizumi-ga-Ike, que dispone de un afloramiento rocoso parecido a una montaña (un jardín seco o karesansui), una pequeña playa cubierta de piedras, y un islote con una roca de dos metros de alto que sobresale de forma prominente en un ángulo. Esta última se ha convertido en un símbolo del jardín.

El pabellón principal destaca cerca del afloramiento de roca en la orilla de Ōizumi-ga-Ike.

Un riachuelo de 80 metros de largo, o yarimizu en japonés, alimenta el estanque, un valioso remanente del jardín original del período Heian. Si el visitante observa con atención el jardín, apreciará cómo su ingenioso diseño permite disfrutar de vistas perfectas de las montañas que lo rodean y de la naturaleza en forma de paisaje prestado.

Cada mes de mayo se celebra un tradicional encuentro poético, el Gokusui no En, junto a las aguas serpenteantes del riachuelos con participantes ataviados con trajes propios del período Heian. (© Mōtsūji)

Experimentar el relajante zazen y la transcripción de sutras

Los visitantes unen mente y cuerpo durante una sesión de meditación zazen. (© Mōtsūji)

En el pabellón principal del Mōtsūji se celebran regularmente sesiones de meditación zazen y de transcripción de sutras budistas. Sentarse con la espalda recta y respirar lentamente en posición sedente de meditación puede ayudar a calmar y mejorar la concentración, mientras que la copia de los caracteres de los sutras budistas contribuye a mejorar la habilidad para escribir en japonés así como para disciplinar la mente.

Información

  • Dirección: 58 Aza Ōsawa, Hiraizumi, Hiraizumi, prefectura de Iwate.
  • Acceso: a 10 minutos a pie desde la estación de JR Hiraizumi.
  • Tel.: 0191-46-2331
  • Abierto de 8:30 am a 5:00 pm (hasta las 4:30 pm, entre el 5 de noviembre y el 4 de marzo)
  • Abierto todo el año.
  • Precio: adultos, 500 yenes; estudiantes de instituto, 300 yenes; estudiantes de escuela primaria y secundaria, 100 yenes.
  • Sesiones de zazen y transcripción de sutras: se puede participar de forma individual, y debe solicitarse al menos con tres días de antelación.
  • Información multilingüe:
    • Sitio web: http://www.motsuji.or.jp/en/ (disponible también en chino simplificado y tradicional, coreano y tailandés)
    • Folletos disponibles en inglés, chino tradicional y coreano.
    • Carteles de las instalaciones en inglés.
    • Guías de audio (y audio pen) disponibles en inglés, chino simplificado, coreano, francés, alemán y español.

Una atracción cercana: el restaurante Shōfūan

La especialidad de la casa, mori soba frío, por 700 yenes.

El Shōfūan es un restaurante situado en los terrenos del Mōtsūji donde el visitante puede probar unos excelentes fideos soba así como una variedad de platos dulces. Los fideos son una mezcla aromática de trigo sarraceno molido de Hokkaidō y Yamagata de una textura sedosa y suave. También se recomiendan los dulces como el dango o el warabimochi con un bol de té verde en polvo.

Información

  • Dirección: (en los terrenos del Mōtsūji) 58 Aza Ōsawa, Hiraizumi, Hiraizumi, prefectura de Iwate.
  • Acceso: a 10 minutos a pie desde la estación de JR Hiraizumi.
  • Tel.: 0191-46-2331 (Mōtsūji)
  • Abierto de 10:00 am a 3:00 pm.
  • Abierto todo el año.
  • Precio: Un plato de fideos mori soba por 700 yenes; un set de dango y té verde por 500 yenes; un set de warabimochi y té verde por 500 yenes.
  • Información multilingüe:

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